¿Te acuerdas de la película “Dumbo”? Hay una escena que me marcó especialmente. Encuéntrala en el siguiente enlace
Hacía tiempo que quería hablarte de ella porque últimamente he sentido que he perdido “mi pluma mágica”. ¿Alguna vez te has sentido así?
Es esa sensación de que hubo un tiempo anterior en que todo parecía fluir: abundancia, trabajo, relaciones, bonitas casualidades… y, no sabes cómo pero algo dejó de rodar. De pronto te encuentras que, donde antes había facilidad y energía, ahora hay dificultad y que todo cuesta. Que donde antes había alegría, ahora, quizás hay tristeza.
Es como si antes tuvieras “la pluma mágica” y ahora se hubiera ido volando.
En ese momento de vacío, de barrena, de pérdida, de vértigo, de “¡mierda!”, de “nada sale bien”, de confusión, de precipitarte hacia lo más incierto, de desesperación, de angustia, de desorientación… ¿me sigues?
Esa caída, que a veces puedes llegar a sentir como “caída libre”. Esta sensación, puede llegar incluso a poner en cuestión toda tu trayectoria, tus decisiones, tu manera de ser, de pensar, de vivir, porque esa caída, inevitablemente, se va llevando capas de ti consigo. Capas que quizás son patrones, formas de ser o hacer que ya no sirven, miedos, sobras de tu vida anterior.
¿Por qué te traigo este tema hoy? Porque quería expresarte que sí, “hay días de mierda” y que la vida está llena de “ups and downs”, de “highs and lows” y que hoy quiero que sepas que alguien me ha contado un secreto sobre ti… Me ha dicho que siente un orgullo enorme al verte, que te quiere mucho y que siempre estará a tu lado. Me ha dicho que te está esperando desde hace tiempo y que te diga que lo estás haciendo muy bien. También me ha dicho que no te des tan duro, a veces. Que solo tú piensas esas cosas de ti. ¡Ah! Sí, también me ha recordado que “La pluma mágica” está dentro de ti. Que dejes de buscarla fuera, my love. Está dentro. Y no, no la has perdido. No has perdido tu pluma, mi Dumbit@. Ahora, mientras lees esto, quizás y ojalá, la estés recordando.
Siempre he estado aquí. Nunca me he alejado de ti.
Respira conmigo… hondo…
Exhala…
Todo está bien. Todo va a ir bien. Y lo estás haciendo muy bien.
¿Te das cuenta, my friend?
Cuando alguien cree en ti, no hay nada que te ponga límites, mas lo que tú crees que puedes.
Si alguien confía en ti y te dice que puedes, algo en ti lo cree y vas a por ello y… ese alguien, puedes ser tu mism@.
Hoy, permíteme ser tu ratoncito y proyectar en ti, creer en ti, confiar en ti, más allá de lo que te crees capaz, amor.
¿Sabes? Esto es Coaching.
Proyectar en el otro que es capaz de volar y que lo logrará.
Es creer en ti, que estás leyendo estas palabras. Es saber que aunque tú creas que hayas perdido tu pluma y sientas que no puedes dar un paso más, hay alguien ahí que sabe que puedes dar, por lo menos, otro paso más.
Creo que nunca había encontrado una manera más acertada de transmitirte qué es lo que amo y hago… Así que emocionada de que sigas ahí, del otro lado, compartiendo tu valiosísima energía conmigo, estés donde estés.
Ahora te digo a ti, pronto, vuela, abre las orejas.
Ojalá algo de esto te llegue en buen momento…
¡Un abrazo y ojalá seas tú todos los días de tu vida!