Recuerda quién eres

Este fin de semana he asistido, un año más al “Summit of Greatness” donde se han compartido muchísimas perlitas que tenía que recordar. Muchas veces estos eventos de desarrollo personal no nos traen tanto cosas que no sabemos, sino cosas que ya sabemos y hemos olvidado. Y, por si acaso necesites recordar alguna de ellas… ¡Ahí van! 

• Cada decisión que tomas representa el privilegio de tu libertad – Tara Swart
• Las personas no te pagan por la información que les das, sino por la organización y la aplicación de tu contenido – Rory Vaden
• La mente será coherente con que crees que es la realidad – Max Major
• Nunca temas pivotar en tu profesión. ¿Quién sabe nada de tu destino? – Jojo
• ¿Cómo puedes salir de en medio de entre tú y tus sueños? Dejándolos ir. Suelta tu mayor sueño por un día y observa el milagro + Hazte amiga de las partes de ti que has estado evitando –Gabby Berstein
• Tus obstáculos son tus bendiciones + Acepta lo que es, sueña con lo que puede ser – Amy Purdy
• Si quieres que las cosas te vayan mejor, conviértete en alguien mejor + trabaja sobre tus 3 “I”s: Identidad (quién eres), Intención (propósito) e Iniciativa (acción) – Brendon Burchard
• Solo tienes una misión en esta vida y es cuidar del ser humano que se te ha dado, es decir, a ti – Matthew Hussey
• Ten protocolos para tus estados de meditación y también de activación + sube el cortisol lo antes que puedas en el día para que esté lo más abajo al final del día. – Andrew Huberman

Son frases sacadas de grandes charlas pero un pequeño ejemplo de lo que ahí se vivió pero, si me preguntas por la que más me tocó, sin duda, se la lleva Matthew Hussey y su concepto relacionado con el amor propio.

Amarse es una acción, es un verbo y por lo tanto no se accede a ese amor solo a través del pensamiento. Otra de las perspectivas que me fascinó respecto a cómo amarte es la siguiente: Pregúntale a cualquier padre del planeta ¿por qué quiere a sus hijos? O a cualquier dueño de animales ¿por qué quieres a tu perro o a tu gato? Te mirarían raro y te dirían: Porque es mi hijo/a o mi gata o mi perro.

No se necesitan razones para querer a alguien.

No necesitas ninguna razón para quererte.

La única, si acaso es porque eres un milagro y porque se te ha encomendado una misión desde que más o menos eres mayor de edad y esa es la de cuidar al humano o la humana que te encuentras en el reflejo de tu espejo.

Honra tu misión.