¿Eres así de nacimiento?

El otro día leí un post de @rainbowsalt que reposteó @lewishowes en Instagram que me gustó mucho:
“The kindest people are not born that way, they are made. They are the souls that have experienced so much at the hands of life, they are the ones who have dug themselves out of the dark, who have fought to turn every loss into a lesson. The kindest people do not just exist – they choose to believe in goodness, because they have seen firsthand why compassion is so necessary. They have seen firsthand why tenderness is so important in this world.”
«Las personas más amables no nacen así, se hacen. Son las almas que han experimentado tanto en la vida, son las que se han levantado de la oscuridad, las que han luchado para convertir cada pérdida en una lección. Las personas más amables no solo existen, eligen creer en la bondad, porque han visto de primera mano por qué la compasión es tan necesaria. Han visto de primera mano por qué la ternura es tan importante en este mundo.»
En realidad, creo que ambas son ciertas.
Creo que la amabilidad es innata y así lo corroboran varios estudios realizados con bebés donde, desde muy temprana edad, ya se muestras gestos de empatía y generosidad ante la debilidad o sufrimiento del otro.
También creo que las experiencias vitales pueden mellar o desarrollar esa capacidad según lo que nosotros decidamos qué hacer con ellas.
Las experiencias dolorosas, especialmente en relación a otros seres humanos, nos pueden:
- Cerrar y endurecer el corazón, convirtiéndonos en personas herméticas e impermeables, tanto a las experiencias desagradables, como también a las agradables de la vida. Son personas con miedo al dolor pero aparentemente frías y serenas.
- Romper y ablandar el corazón provocando que nos sintamos débiles e indefensos ante las dinámicas relacionales. Es uno que se deja “machacar” por rechazos, malas contestaciones y patujadas varias ajenas. Son personas de perfil más “víctima”.
- Mantener con el corazón abierto y elástico. Un corazón así es uno que sabe que va a sentir dolor en algún momento de la vida pero que no se cierra ante los demás todo el resto de días en que eso no sucede. Es uno que va abierto y generoso, confiado. No significa que sea ingenuo, ya que un corazón abierto está más conectado con la intuición. Se trata de un corazón que ha sentido dolor y sufrimiento y que con todo abraza todos los “colores” de la vida. Es uno que es capaz de conectar con las emociones de los demás, capacitándolo de una gran empatía y amabilidad.
Todos podemos ir oscilando entre diferentes etapas del corazón.
¿En cuál te encuentras ahora?
Me despido con una frase de Michael A. Singer…
No hay nada por lo que valga la pena cerrar tu corazón.
Ojalá podamos siempre reconectar con ese corazón con el que nacimos, abiertos, confiados y amables con nosotros mismos y con los demás.
No nos tengamos miedo, ¿es posible?
Gracias por mantener tu corazón abierto.
Vale toda la alegría.
🙏🏽Gracias por leerme. Significa el mundo para mí. 🙏🏽
🤗Un abrazo de corazón 💚a corazón.💚
Con todo mi amor,