Quiero empezar por pedir perdón a todas las personas que no se han sentido especiales o importantes para mí en algún momento.
No tengo excusas. Simplemente lo siento.
Siento no haber estado ahí para ti como tú lo necesitabas.
Podría decirte que es porque tenía mucho trabajo, que no llegaba a todo, pero lo cierto es que uno siempre tiene tiempo para las personas que te importan.
Sería más honesto decirte que me prioricé y que sabía que si quedaba contigo eso me iba a hacer sentir peor por no llegar a lo que quería hacer. Lo honesto sería decir que igual teníamos alguna conversación pendiente incómoda entre manos y preferí encontrarme con personas que no me descolocaran tanto como tú.
Prioricé mis emociones, mis pensamientos y mis objetivos por encima de los tuyos.
Era decepcionarte a ti o decepcionarme a mí. No había algo en medio. O sí, pero no lo exploré.
Elegí mi decepción. Elegí decepcionarte a ti.
Desde luego que, si me conoces, sabes que no fue de manera consciente, ni con alevosía y dolo pero lo que es seguro es que me elegí a mí antes que a ti.
Y eso no siempre está mal pero si en esa elección te hice daño, lo siento.
No sé cómo te habrá ido la semana a ti, pero déjame decirte algo:
Nunca podrás contentar a todos y, de hecho, si lo intentas acabarás por no contentarte a ti. Hagas lo que hagas, tus conductas tienen un impacto en los demás. Hagas lo que hagas, puede que, sin querer, por el camino, decepciones a alguien. O a ti o al otro.
Lo importante es ser consciente y actuar en consecuencia. ¿Cuál va a ser el daño mayor? ¿Cuál va a ser el bien mayor? Si miras toda la situación, el contexto y el momento con perspectiva, ¿cuál es la mejor decisición que puedes tomar ahora?
Elige tu decepción. Elige tú. Elige.
¡Espero que estas palabras sean de tu agrado!
Más Kindfulness para todos.
Porque no todos vamos en el mismo barco,
Pero todos compartimos el mismo mar.
💚¡Un abrazo de corazón a corazón 💚 y …
¡Ojalá seas tú todos los días de tu vida!
Con todo mi amor,