¿Volverías a escoger a tus padres?
Hace unos días llamé a mis padres y, no sé cómo salió el tema pero acabé preguntándoles de dónde venían sus ancestros, también los míos.
Resulta que soy un poco irlandesa, alemana, italiana, argentina y española (canaria, valenciana, gallega, …). Vamos, que si fuera un perro, sería un mil leches.
El caso es que tras averiguar mis orígenes les pregunté a mis padres si ellos volverían a escoger a los suyos.
Tenía la intuición de que mi madre diría que sí. Acerté.
Con mi padre me equivoqué.
Pensé que diría que no.
Afirmó que les volvería a escoger, a pesar de todo, porque él es quien es porque la vida se sucedió exactamente así y con esos padres.
El silencio estaba servido.
Me tocaba a mí.
Les volvería a escoger siempre. Me siento inmensamente agradecida por los padres que tengo ahora y por los padres que fueron. Con todo. Gracias a ellos soy la persona que soy.
Somos gracias a la conjunción de todas las decisiones que tomaron nuestros ancestros.
Gracias a que mis abuelos paternos fueron como fueron, mi padre es como es y yo soy como soy. Lo mismo con mis abuelos maternos. Y con los tuyos.
¿Te imaginas que hubiera habido un pequeño viraje? No existirías.
La vida es sincronía, como diría Carl G. Jung.
¿Volverías a escoger a tus padres?
Es realmente triste y desolador encontrarte con personas que no volverían a escoger a sus padres. Por un lado siento pena porque todos los seres humanos se merecen haber recibido el amor que he recibido y, por otra, me hace darme cuenta de lo privilegiada que soy por haber recibido amor y tener una familia a la que siempre puedo volver, para reír, para llorar, para conversar y para sentir que pertenezco.
Si eres igual de afortunad@ que yo, te invito a verbalizarle a tu familia tu agradecimiento (estén en este plano o no) y, si no te sientes privilegiad@ en este sentido, te propongo reflexionar acerca de las siguientes preguntas:
. ¿Qué has podido desarrollar debido a que no han sido como tú pensabas que tenían que ser?
. ¿De qué forma te ha influido?
. ¿Gracias a ello qué has podido aportar a tu entorno que ellos quizás no te aportaron a ti?
El post de hoy es una oda a todas las personas que, voluntaria o involuntariamente, se han embarcado en la aventura de ejercer la paternidad.
No todos
somos padres,
pero todos
somos hijos.
Gracias a todas las madres y a todos los padres que les dan amor a sus hijos.
¡Un abrazo y ojalá seas tú todos los días de tu vida!