¿Estás siguiendo las señales?
¿Sabes cómo he llegado a Austin, Texas?
Además de en avión, claro está.
Llegué a Nueva York el pasado miércoles y al cabo de un par de días sentí que Nueva York, donde ya había estado hacía un par de años, no era el lugar de destino final.
No había un gran SÍ. Ese SÍ que sí sentí cuando vine en 2019.
Así que ahí estaba yo dándole vueltas y me dije “voy a pedir una señal para ver a dónde ir“.
Tenía algunas opciones en mente:
– Cleveland, donde vive un gran amigo.
– Austin, donde vive otro gran amigo.
– La tercera era dejarme de señales e historias y quedarme en Nueva York disfrutando de la ciudad.
Solté el pensamiento y al cabo de unos 10 minutos aparece en el suelo una bolsa de “Bucees”.
Bucees es una gasolinera de Texas que tiene varias ubicaciones. La más cercana a Nueva York está a unos 3.000 km.
Como dicen en inglés:
What are the odds?
¿Cuáles son las probabilidades de que me encuentre una bolsa de esa gasolinera de Texas que conocí el año pasado cuando estuve en Austin en una calle de Nueva York?
No soy matemática pero creo que las probabilidades son muy bajas.
Así que esa señal fue suficiente para volver a casa de mi amigo y comprarme los billetes para Austin.
Mi hermana se reía de mí (y conmigo) diciendo:
Así es mi hermana, “Una bolsa de plástico: ¡me voy a Austin!”
La verdad es que contado así es gracioso.
Pero en realidad es muy serio.
Siento que todos tenemos una voz que nos habla si la escuchamos. Sea en forma de bolsas de plástico voladoras, en forma de sensación en la boca del estómago, quizás tienes un número especial que te confirma que vas bien (en mi caso es el 11 o el 11:11) o quizás es simplemente una sensación general en el cuerpo.
– ¿Qué pasaría si solo le hicieras caso a esa voz?
– ¿Te atreves a ir a dónde te lleve “no matter what”?
– ¿Crees que tienes la valentía suficiente para vivir una vida plenamente conectada con TU voz interior?
Y eso no significa que no puedas mantener tus rutinas, tu trabajo o tus relaciones. O que dejes todo para dar la vuelta al mundo. Esa voz nos acompaña cada día, desde lo más pequeño a lo más grande.
Simplemente creo que en el mundo “hábito” o mundo “automático” no le concedemos tanto espacio.
Sigue las señales. Permítete ver a dónde te llevan.
Y quizás, solo quizás y sin el quizás experimentes o, mejor dicho, recuerdes, que la magia sí existe.
Y siempre ha estado ahí.
Tanto en los mejores como en los peores momentos.
Ella siempre está ahí para decirte que todo forma parte de una foto más grande que la que eres capaz de ver ahora.
Así que me despido con un mensaje…
Sigue las bolsas de plástico voladoras.
Sigue las señales.
💚¡Te mando un abrazo con todo mi amor de mi pasado en este momento presente!💚
¡Un abrazo y ojalá seas tú todos los días de tu vida!
Con todo mi amor,